Los nuevos nichos de empleo que impulsará el Ayuntamiento: biosanidad, inteligencia artificial y fabricación digital

Los presupuestos de 2022 incluyen fondos para construir una ‘incubadora’ de empresas biosanitarias, un centro para la promoción de proyectos ligados a la inteligencia artificial y un taller relacionado con la impresión y fabricación en 3D. 

La industria del conocimiento, la logística y el puerto seco son «los puntales del futuro económico de la ciudad», en palabras del alcalde, Carlos García Carbayo. El primer edil presentó esta mañana las líneas maestras de los presupuestos municipales, entre las que se incluyen medidas como la puesta en marcha de la incubadora de alta tecnología Abionnova, el taller Fab Lab Tormes+ y un ‘empujón’ al puerto seco de la ciudad. 

Abionnova se levantará en el futuro campus agroambiental y estará vinculada «con el sector biosanitario, un sector muy importante no sólo para nuestra ciudad, sino para nuestra provincia y un ámbito de colaboración preferente». La Usal, el Irnasa y la Diputación serán los compañeros de viaje del Ayuntamiento en este proyecto «ligado a un ámbito de investigación muy relacionado con nuestra tradición» y pensado para facilitar la puesta en marcha de empresas biosanitarias. La construcción comenzará «antes de que acabe el año». 

Por otra parte, el Ayuntamiento impulsará en la avenida Santiago Madrigal un centro para la promoción de proyectos ligados a los sectores de la inteligencia artificial y el internet de las cosas. El proyecto «está redactado y estamos en licitación para que sea una realidad cuanto antes»

Finalmente, el Fab Lab Tormes+ está pensado como un taller que ofrecerá a los profesionales, empresas, particulares y estudiantes la posibilidad de conocer herramientas de fabricación digital como la impresión 3D, el escaneado 3D o el corte y grabado láser. «Se está terminando el equipamiento» y pronto comenzará la «fase de pruebas» para que las empresas puedan «trabajar con los medios más modernos en el campo digital» cuando antes. 

Fuente: La Tribuna de Salamanca

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